Los juegos de mesa siempre han sido una estupenda forma de pasar el tiempo. Y como los hay para todas las edades, nunca nos faltará un buen título al que echarle mano para combatir el aburrimiento. Además, por las características de cada uno, sirven para reforzar determinados aspectos de la formación de nuestros hijos. Por ejemplo, para empezar a hacer sumas (sencillas), una partidita de La Oca en la que tengan que sumar los resultados de los dos dados que se lanzan (sumas sencillas que van de 1+1 a 6+6) viene muy bien.
El que hoy os comentamos en cambio, servirá para estimular su memoria pero sobre todo para pasar un rato muy divertido, porque es un gran juego. Se llama “El Laberinto Mágico” y su calidad (en todos los aspectos) se vio avalada en el año 2009 con la concesión del premio al juego del año infantil (Kinderspiel des Jahres, que por lo visto viene a ser el galardón de mayor prestigio entre los juegos de mesa infantiles).
En este juego (para 2 a 4 jugadores, a partir de unos 4 años) representamos el papel de magos que deben reunir cinco símbolos mágicos. ¡Pero no todo es tan fácil como parece! Hay muros invisibles que nos harán tropezar y tener que empezar de nuevo, y que pondrán a prueba nuestra memoria. ¿Recordará nuestro mago dónde estaba el muro contra el que chocó la última vez para así poder evitarlo?
Las reglas son extremadamente sencillas (para no liaros intentando explicarlas, os dejo este enlace, en donde las podéis consultar; ¡y en 3 idiomas!). El aspecto material y visual del juego es fabuloso. Las piezas (bloques para construir el laberinto, tablero de juego, peones de los magos, símbolos…) son de una calidad excelente y el aspecto gráfico del juego está muy cuidado. ¿Qué más se puede pedir?
En definitiva, ahora que se acercan los Reyes Magos, es una opción magnífica para que los pequeños pasen un buen rato; y también para pasarlo nosotros con ellos.